Artículo publicado por Fernando Pérez en
http://tradingsinfronteras.blogspot.com.es/
OPERATIVA CON MÍNIMOS CRECIENTES Y MÁXIMOS DECRECIENTES
Operar con este tipo de operativa de Price action, no resulta muy complicado en cuanto la conocemos un poco. El precio suele moverse en ondas y estas las podemos detectar con este sistema utilizado desde que los gráficos comenzaron a dibujarse en papel milimetrado e incluso antes cuando la gente operaba de memoria. Su mayor ventaja es que se puede usar en todos los time frames, desde gráficos de 1 minuto, hasta en los mensuales y dependerá de nuestra operativa, con el que decidamos trabajar. Si trabajamos con acciones y a largo plazo, deberemos trabajar con gráficos diarios, semanales y mensuales. Si trabajamos derivados en intradía, entonces los de 1, 5 y 15 minutos serán los apropiados. Si trabajamos swing, los de 5, 15 y 60, serán nuestras herramientas.
Estudiaremos como se forman estas ondas y también como sacar unas “posibles” mediciones de objetivos que nos pueden ayudar a establecer una estrategia.
También debemos llevar una lectura de ondas de Elliot para establecer la quinta y última donde debería finalizar el movimiento.
LAS ONDAS
Debemos de partir de un suelo o techo y esperar a que tras una caída, (en el caso de un movimiento bajista) aparezca un rebote que sería la onda 1 de un movimiento alcista y que este movimiento alcista tenga una corrección. Esta corrección sería la onda 2. Veamos un gráfico de 5 minutos con las ondas ya formadas y estudiémoslo.
Para entender mejor la formación de las ondas hay que considerar que Elliot determina que una de las ondas va a ser extendida, bien la 3 o la 5. Las otras dos serán semejantes. En el caso expuesto, la onda 5 es la extendida. Y a su vez, la onda extendida puede (que no debe) estar formada por otras 5 más pequeñas. En este gráfico vemos como los máximos de las ondas 2 y 4 son ordenados y posteriormente la 5 se extiende siendo vertical la caída.
Esto es básicamente lo que debemos seguir pero no siempre es tan ordenado y perfecto. Vamos a ver otro ejemplo de 5 extendida pero con diferencias. En este caso la onda 4 cae hasta el soporte que marcó la 2 y la 5 aunque extendida, no es tan vertical, transcurre en un plazo mayor de tiempo y se forma con 5 ondas adicionales.
Más o menos esto es lo que nos vamos a encontrar con algunas variantes en cuanto a formación y tiempo. Es cuestión de observar gráficos y estudiar el comportamiento en el time frame que usted desee operar.
CALCULAR LOS OBJETIVOS
Podemos establecer unos objetivos en cuanto tenemos las ondas 1 y 2 completadas y lo haremos de dos formas. La primera nos servirá para extraer el objetivo de la onda 3 en el caso de que la 5 sea extendida. La segunda opción nos marcará el posible final del movimiento si no estamos ante un ABC correctiva del 1, 2, 3, 4, 5 anterior. En este caso solo se formarán tres ondas.
Vamos a ver la primera opción. Una vez determinadas la 1 y el posible final del 2, (hasta que la 1 no es superada por la 3 no se confirma la 2) debemos marcar el rango de la 1 bien con un fibo o con un cuadrado como en el gráfico que vamos a ver. Desplazamos este cuadrado al soporte o resistencia que nos haya marcado la 2 con lo que obtenemos una proyección de la onda 1. Este debe ser el final aproximado de la onda 3 en el caso de una 5 extendida.
Una vez la 3 comienza a corregir para formar la 4, debemos regirnos por las extensiones de fibonacci. Para ello debemos regirnos marcar un fibo que abarque el rango de la onda 1. Los softwares de gráficos suelen llevar incluidos estas extensiones por defecto aunque yo con el paso del tiempo me he decidido a usar tres. El 161.8 o 1.618 dependiendo de cómo esté configurada la plataforma, 261.8 o 2.618 y 323.6 o 3.326. El final de la onda 5 puede ser el 261.8 o el 323.6. No siempre será en la misma zona pero al menos tenemos una referencia. Vamos a ver el gráfico ya completo con todas las herramientas.
En el caso de una 3 extendida nos guiaremos directamente por las extensiones.
INDICADORES
Aunque el sistema por si solo es suficiente, el añadir unas medias exponenciales de 40 y 70 como seguidoras de tendencia, no es mala idea. Sobretodo la EMA 40 sirve de apoyo en los movimientos más laterales.
Añadir algún MACD, estocástico o Willinas nos puede dar una referencia junto a la medición de ondas de cuándo puede comenzar una nueva onda 1.
ESTRATEGIA OPERATIVA
La estrategia va a depender mucho del tipo de operativa que deseemos. Vamos a plantear las diversas formas en las que nos podemos enfrentar. Ante todo deben ustedes estudiar bien esta estrategia y operarla en demo o bien simulando. No se debe poner una estrategia en marcha sin conocer los diversos escenarios que nos vamos a encontrar. Una vez conocido el sistema y las trampas que nos ofrecerá el mercado y solo cuando tengamos la seguridad de que podemos aplicarla con el mínimo fallo, debemos operar con dinero real.
El rango de la onda 1 nos marcará la amplitud del movimiento posterior. Por ejemplo, en el S&P 500, una onda 1 con un rango de 5 ptos, nos ofrecerá un movimiento posterior menor que una onda 1 de 10 ptos. Esto hará que sepamos a que nos podemos enfrentar una vez tomada la posición.
REGLA DE ORO
La primera y regla de oro del sistema, consiste en esperar a que la onda 2 esté confirmada. Para ello la onda 1 debe ser superada por la 3. Si entramos antes que la resistencia haya sido rota, se corre el riesgo de encontrarnos con que la onda 2 acaba en un doble suelo o techo. La onda 2 será el soporte (siempre hablando de movimientos alcistas). Entrar antes supone un riesgo que nos puede costar caro y si estamos ante un ABC plano, el precio puede girar en nuestra contra.
Una advertencia. Los time frames mayores son más estables que los menores. Un gráfico de 1 minuto puede llegar a ser muy rápido y los stops pueden saltar por un tick si se ajustan demasiado. Sin embargo, los gráficos a partir de una hora son más estables y nos dejan un mayor tiempo de reacción. Si usted desea probar el sistema en intradía debe entender que va a ser sometido a tomas de decisiones en pocos segundos para las que quizás no esté preparado. Debe encontrar su sitio según su forma de pensar y actuar. Si es impulsivo, posiblemente el intradía sea una mala idea y necesite operar en un plazo mayor de días o semanas. La avaricia es mala compañera de viaje para un trader.
ESTRATEGIA INTRADÍA
Para el intradía puro y duro debemos colocar los gráficos de 1, 5 y 15 minutos (este último no es estrictamente necesario) e intentar leer las ondas esperando a que un ABC se confirme. Entonces podemos prepararnos para la onda 1. Aplicamos la regla de oro y una vez la onda 3 supere a la 1, entramos. Se puede colocar una orden por encima de la onda 1 y esperar a que entre y colocar el stop por debajo de la onda 2.
Ahora va a depender de lo que usted desee ganar. Si va a por unos pocos puntos, lo mejor es cerrar al final de la 3 y si esta es la extendida, se llevará un buen puñado de puntos y de paso si nos hemos equivocado en la lectura y estamos ante un ABC de tres ondas, no nos saltará el stop. Si desea esperar a la 5, el stop debe estar por debajo de la 2 hasta la 4 esté formada y la 5 rompa la resistencia de la 3 y solo entonces desplazamos el stop por debajo de la 4.
Se recogen beneficios al final de la 5 si ha elegido esta opción.
ESTRATEGIA SWING
La base operativa es la misma pero el timing es diferente. Tomaremos la posición en el gráfico de una hora y observaremos los movimientos menores en el gráfico de 15 y 5 minutos por si nos ofrece alguna aclaración del movimiento pero las ondas debemos leerlas en el de una hora. Una posición tomada en un gráfico de una hora nos puede llevar días e incluso semanas cerrarla por lo que mi recomendación es tomar una posición par y así cerrar la mitad al final de la onda 3 y dejar la otra mitad hasta el final de la 5.
El stop lo podemos dejar por debajo de la 4 o bien si no queremos correr riesgos, en el precio de entrada si este estuviese por encima del stop y así no perdemos parte de los beneficios de la mitad cerrada. Esta segunda opción es también válida para el intradía donde es más común un giro inesperado.